
Este documento presenta 30 buenas prácticas para la equidad de género identificadas en el sector empresarial antioqueño desde la Alianza Empresarial para la Equidad de Género.
Este proceso partió de una revisión crítica a los estándares y criterios para catalogar buenas prácticas, especialmente desde el impacto y resultados que efectivamente tienen estas acciones en los contextos empresariales, culturales, sociales y familiares.
Una buena práctica para la equidad de género comprende las acciones y experiencias afirmativas o positivas implementadas por las empresas cuya finalidad es la generación de condiciones de igualdad que contribuyan a la eliminación de las brechas de género. Por tanto, las buenas prácticas empresariales se enfocan en “erradicar la discriminación, fomentar la igualdad de oportunidades, así como impulsar el bienestar del personal con base en políticas institucionales que consideren la necesidad de un ambiente laboral y familiar más armónico” (INMUJERES, 2010, p. 7).